Las casas de empeño se han presentado, durante décadas, como una alternativa ante la falta de liquidez. Este tipo de empresas no son nuevas, pero hay que saber cómo funcionan y si sus servicios son lo que realmente necesitas.
Normalmente, se pensaría que las tiendas de empeño solo reciben antigüedades o quizá el anillo de oro que tenemos de alguna bisabuela. En la actualidad, se pueden solicitar préstamos dejando como garantía smartphones, tablets o notebooks. Hay algunas que reciben autos o motos con la posibilidad de continuar utilizando el vehículo, mientras se cancela el préstamo.
La diferencia entre vender un producto u objeto y empeñarlo radica en que en el segundo caso se tiene la posibilidad de recuperarlo.
Por lo general, las casas de empeño otorgan entre 40% y 60% del valor que tiene en el mercado el producto usado. Como cualquier otro servicio disponible en el mercado, se puede consultar entre distintas casas cuál ofrece el mejor precio para empeñar.
Al calcular el monto a prestar, las casas de empeño también consideran el riesgo de que el cliente no termine de pagar y no recupere su producto, es por ello que para calcular el monto del empeño también consideran:
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Las casas de empeño se han diversificado. Esto significa que ya no es como en la películas que solamente se aceptaban joyas valiosísimas. Ahora es posible empeñar:
Las tasas de interés cobradas por las casas de empeño generalmente varían entre 5% y 25%.
Las casas de empeño aceptan casi cualquier tipo de artículos como respaldo para un préstamo a corto plazo. Cuando llevas algo a una casa de empeño, el prestamista evalúa su estado y te ofrece lo equivalente a un cierto porcentaje del valor. Luego, tienes un corto período de tiempo para pagar el préstamo con intereses.
Antes de decidir si el empeño es la alternativa que te conviene, revisa cuáles son los pros y los contras en tu caso en particular. En general, se puede decir que la principal ventaja es que se trata de una alternativa al alcance de todos. Eso significa que incluso aquellos con un registro negativo en Central de Riesgo pueden recurrir al empeño, sin que eso signifique que sea una solución real a su problema.
La desventaja es que si no se alcanza a cubrir en tiempo y forma el monto del préstamo y tengas que refrendar por varias ocasiones el empeño o, incluso, perder la pieza empeñada, cuando no lograste mejorar tus finanzas personales.
Si tienes una deuda y no tienes dinero para pagar te recomendamos lo siguiente:
Empeñar es una alternativa viable cuando se necesita dinero en efectivo, es decir, se requiere de la liquidez de manera inmediata. Pero, si necesitas dinero para pagar tus deudas, puedes recurrir a una reparadora de crédito que te ayuda a pagar tus cuentas sin necesidad de empeñar o pedir préstado.
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