Deuda Grupo ASIS/TSAM

En las llamadas, los cobradores te aseguran que tu deuda la adquirió Grupo ASIS o TSAM corporativo y quieres saber cómo pasó eso. Aquí te decimos cómo operan los despachos de cobranza y de qué debes estar alerta para que no te sorprendan ni te hostiguen.

¿Qué son los despachos de cobranza ASIS/TSAM?

Empresas como Grupo ASIS o TSAM corporativo son despachos dedicados a prestar servicios de cobranza cuando adquirieron cartera vencida o también pueden realizar la cobranza en favor de terceros.

Este tipo de cobranza se considera extrajudicial pues utiliza mecanismos de los que puede echar mano cualquier acreedor para reclamar el pago de una deuda, sin que medie una orden judicial para hacerlo.

Esas acciones pueden ser amistosas y de buena voluntad, pero también las habrá desventajosas e incluso ilegales.

Cuando se trata de medidas de conciliación, con ASIS o TSAM o cualquier otro cobrador, el objetivo será llegar a un acuerdo para liquidar los saldos vencidos para evitar llegar a instancias judiciales, es decir, que requieran el pago con la resolución de un juez.

Esto significa que la cobranza extrajudicial es una actividad permitida, como un derecho de los acreedores para reclamar el pago.

Hay que enfatizar que también hay una serie de acciones prohibidas o fuera de la ley, en caso de que el acreedor no respete los derechos del deudor. Es por ello que la cobranza extrajudicial debe apegarse a buenas prácticas, pues en caso de no ocurrir así pueden ser sancionadas hasta con cárcel.

Aunque los gestores de cobranza deben responder a un código de ética y a las buenas prácticas que en este sector ampara la legislación, debes saber que los cobradores pueden incurrir en prácticas ilegales que deben ser reportadas.

¿Cómo reportar a un despacho de cobranza?

Los abusos al cobrar un adeudo se pueden reportar ante la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef). Primero, hay que identificar las malas prácticas que se pueden reportar.

Acá, las principales:

1. Marcar a deshoras. El cobrador no debe llamar a un número particular fuera de horas laborales.
2. Omitir su nombre y el de su empresa. El cobrador debe identificarse plenamente con nombre completo y cargo, así como las referencias completas de la compañía que representa.
3. Cobrar a familiares y amigos del deudor. El cobrador debe especificar con claridad a qué tipo de adeudo se refiere y solo dar la información al titular de dicha mora.
4. Amenazar. Una de las peores prácticas en la cobranza es que el ejecutivo amenace con presuntas acciones legales que ha emprendido o que haga insultos respecto a que “le arrebatará” al deudor su patrimonio con una orden judicial. Incluso hay quienes amenazan con cárcel. Esas son amenazas infundadas. Siempre se requiere que sea la autoridad judicial la encargada de informar al deudor. Nunca un cobrador.
5. Fingir ser representantes de juzgados o de instituciones financieras. Hay quienes incluso pueden presentarse personalmente en el domicilio del deudor para reclamar el pago en efectivo. ¡Esa práctica es fraudulenta! Debe siempre mediar una autoridad que dé las suficientes garantías al moroso, pues los deudores también tienen derechos.

El Registro de Despachos de una Cobranza (REDECO) es una instancia creada específicamente para denunciar malos tratos en el cobro de una deuda. Los usuarios que quieran presentar una queja deben entrar a su página de internet y llenar un formulario al que podrán dar seguimiento.

Para presentar la queja hay que tener a la mano los siguientes datos:

1. Sector financiero

2. Entidad financiera

3. Tipo de producto

4. Nombre del ejecutivo que realizó la mala práctica de cobranza

5. Razón por la que se queja el moroso

La Condusef regula los despachos de cobranza

La Condusef es una agencia del gobierno mexicano que funciona como defensora de los usuarios de cualquier tipo de servicio financiero. Los deudores de bancos o tiendas departamentales, además de sus responsabilidades como morosos, también tienen derechos que son salvaguardados por el marco jurídico vigente y que son vigilados por esta comisión.

Los despachos de cobranza deben cumplir con dichos ordenamientos y no deben actuar al margen de la ley. Estas oficinas gestoras de reclamar el saldo de una deuda ayudan a los bancos y a otras instituciones financieras a negociar o reestructurar créditos, préstamos o financiamientos de los deudores como intermediarios entre el acreedor y el moroso.

Como regulador, la Condusef ha publicado los lineamientos a los que deben ceñirse estos despachos para realizar sus cobros o reestructurar créditos.

Aquí, las más relevantes:

1. Documentar ante el deudor cuál fue el acuerdo de pago, negociación o reestructuración de su crédito, préstamo o financiamiento, así como los términos y las condiciones con las que se comprometió a saldar el adeudo.
2. Señalar el importe a pagar. Esto implica desglosar el monto principal, así como los intereses ordinarios, moratorios y cualquier otro costo relacionado con la mora. Y especificar cómo se finiquita el adeudo o si solo se cubre de manera parcial.
3. Proporcionar el número de cuenta de la entidad financiera en la que se realizará el pago, con el número correspondiente al crédito a saldar.
4. Acreditar con nombre, denominación o razón social del despacho de cobranza y del gestor asignado a realizar el cobro.
5. Informar sobre su domicilio, número telefónico y nombre de las personas responsables de la cobranza.
6. Dirigirse con respeto hacia los deudores.

Ayuda para negociar con ASIS/TSAM

Si es que estás recibiendo las llamadas de cobro y quieres solucionar tu situación, pero no sabes cómo, la recomendación es ponerte en contacto con los especialistas que te ayudarán a lidiar con los acreedores y te ofrecerán una alternativa para enderezar tu situación financiera

Las reparadoras son empresas que ofrecen consultoría especializada sobre cómo salir de una situación de impago, por medio de un programa de ahorro que permitirá reunir una cantidad de dinero, en un plazo de tiempo determinado, para poder contar con fondos suficientes que permitirán saldar el compromiso.

Este mecanismo es especialmente benéfico para el deudor que aprenderá a manejar mejor sus finanzas personales y eso le evitará caer nuevamente en el sobreendeudamiento.

También se harán cargo de las llamadas de los despachos de cobranza y te darán las recomendaciones necesarias para lidiar con las llamadas de sus gestores.